
24 Nov ‘Cuckoos’ y ‘gypsies’: cuando la fábrica deja de ser un problema
Después de nuestros primeros pasos como artesanos en laboratorio de Cesc, en La Brava nos propusimos dar un paso adelante: aumentar la producción sin dejar de lado nuestro compromiso de calidad.
Fieles a nuestra raíz, y conscientes de que el reto no es nada sencillo, nos esforzamos en testar y desarrollar una nueva receta para convertirnos en la primera cerveza de Girona. ¿Y qué mejor que hacerlo de la mano de los que más saben?
Es por eso que, fruto de nuestra obsesión por ofrecerte una cerveza redonda, hemos seguido los pasos de los muchos cerveceros de todo el mundo que, en vez de invertir inicialmente en una fábrica propia, han decidido centrar toda la atención —y los recursos— en la búsqueda de la cerveza perfecta.
Es el caso del maestro danés Mikkel Borg Bjergsø, más conocido como Mikkeller, que en menos de diez años se ha convertido en uno de los cerveceros más revolucionarios del sector, con cerca de 700 referencias diferentes que se distribuyen en medio centenar de países.
Él fue uno de los primeros en hablar de los gypsy brewers, los productores que por no contar con las instalaciones necesarias tampoco renuncian a hacer llegar sus cervezas al gran público. Y lo que es más importante, a compartir conocimientos con maestros de todo el mundo en sus fábricas.
El caso de Mikkeller es sólo la punta del iceberg de un fenómeno que ha permitido a miles de cerveceras cumplir su sueño. Tanto en el extranjero como en nuestro país. De hecho, una institución de la cerveza artesana en Cataluña, el tristemente desaparecido Steve Huxley, reconoció en su web la condición de cuckoo brewer, o maestro que utiliza las instalaciones de una fábrica amiga, aunque, a diferencia de los gypsies, no utiliza la pasión para fabricar cerveza para «explorar el mundo».
En La Brava no nos escondemos: también hemos recurrido a la experiencia de nuestros amigos checos, con los que compartimos la inquietud por conseguir la receta perfecta: una cerveza inspirada en la Costa Brava, pero elaborada con ingredientes naturales con los parámetros de calidad y la traza de una fábrica con más de 100 años de historia.
Después de muchos meses de trabajo conjunto, te presentamos orgullosos la primera referencia de La Brava.
¡Salut!